SYMBOLOS

Revista internacional de
Arte - Cultura - Gnosis

PHOENIX 10

POEMARIO DE
FEDERICO GONZÁLEZ FRÍAS
CON LAS VOCES DE FEDERICO GONZÁLEZ
Y DE LOS MIEMBROS DEL ATENEO DEL AGARTHA


Música: Offenbach. Les contes d’Hoffmann.

10 SOLSTICIO DE INVIERNO 1985

Música: Carlos Santana. “Samba pa ti”.

Voz del Ateneo:
“Ya sabes que no eres
la suma de tus huesos
y conocimientos,
el número limitado de sus órganos,
los kilos de tu peso,
ni el compendio de tus experiencias
tan mutables con los años,
mientras tus células
se renuevan constantes y exactas
al ritmo de la Creación
en ciclos precisos,
y estas de hoy
no son las de ayer
y tampoco las de mañana”.

Voz del Ateneo:
“Te preguntas nuevamente
quién eres,
¿Quién soy?
inquiere este conjunto
de viento y nada,
que sin embargo
es capaz de preguntar”.

Voz del Ateneo:
“Te dices que aún cuando tu nombre
no fuese más tu nombre
y tu patria otra comarca
y el licor de la memoria
se transformara en puro olvido.
Y fueras otro
o no te acordases más de ti
¿Qué serías?
¿Quién serías?”

Voz del Ateneo:
“Y aunque hayas podido abolir
el espacio y el tiempo
y conocido
la fuente de Vida,
y no eres ya el mismo
¿Quién eres?
¿Qué pasado me aguarda?
¿Qué futuro viví?”

Voz del Ateneo:
“No hay preguntas
en ciertas situaciones,
la Belleza es el fin de la Esperanza”.

Voz del Ateneo:
“El sí-mismo
ya ha sido,
siempre será,
es ahora
en el corazón
que se abre a la Esperanza
para contemplar la Belleza”.1


9 MAYÉUTICA

Música: Los Panchos. “Si tú me dices ven”. Sólo instrumentos.

Voz de Federico:
“Desconocida hasta hoy Asclepigenia, de ti sólo tu nombre, tu ascendencia, cómo iba a sospechar que en el Río de la Plata se encontrara viva tu presencia por efluvios de Proclo el prodigioso varón, hijo de Hermes, insigne recreador de Platón y de la ciencia sagrada. Ni yo mismo creo algo así, me lo impide mi propia desventura, mi ignorancia, los cuarenta años pasados en la sombra de la caverna, el destierro del Sí que no quita mi visita al Olimpo. Y el tuteo reiterado con los dioses realizado con simples intuiciones y el recuerdo de los arquetipos aprendidos de la mente divina.

¡Magnánimo Proclo, cómo he venido a parar a estos menesteres que no se pueden explicar sino por la locura divina! Llenar quiero mi copa hoy vacía y honrar tu presencia permanente en mí, Asclepigenia, y en los que están a mi cuidado, milagro de amor no sujeto a las horas, ya que no hay muerte sino simultaneidad en la patria celeste, ni nadie que se niegue a compartirla.

Y allí estás tú sencilla y complaciente encarnación de la diosa a tiro de piedra de nuestras necedades y olvidos. Madre del saber (no me has hablado en griego) y la teúrgia, infalible guía en un camino sembrado de horrores e incertidumbres donde tu belleza y tu calor avivan perennemente la llama del deseo de llegar al último puerto, al lugar donde habitas, una vez que tus pares designen que mi menguada labor es ya innecesaria”.2


8 HIMNO

Música: Piazzola. “Libertango”.

Voz del Ateneo:
“Y aquí estamos nosotros, personal calificado en estas disciplinas”,

Voz del Ateneo:
“y a nuestra medida y forma haremos todo lo posible y seguiremos volcándonos
hacia los otros para mantener el esplendor de la Tradición Hermética”,

Voz del Ateneo:
“Eso somos, trabajadores de una Tradición muy antigua”,

Voz del Ateneo:
“que ha tomado diferentes modos de expresión
y de la cual somos servidores y empleados”

Voz del Ateneo:
“y sobre todo soldados”,

Voz del Ateneo:
“con muy poca fuerza pero convencidos
de la inmensidad de lo que representamos”.

Voz del Ateneo:
“Acepta, pues nuestra labor ya que tú sabes
que hace largos años que estamos en estos menesteres”.

Voz del Ateneo:
“Y eso es todo”,

Voz del Ateneo:
“aunque siempre hay cosas nuevas y formas diferentes
de realizar nuestro trabajo para despertar el intelecto divino”.

Voz del Ateneo:
“Y agradecerte por todo ello”,

Voz del Ateneo:
“una y otra vez”,

Voz del Ateneo:
“entonando estos himnos de alabanza”.3


7 A VENUS

Música: Shocking Blue. “Venus”.

Voz del Ateneo:
— “¡Óyeme Venus! En tu nombre, en tu nombre se dijeron esas cosas tan bonitas. En tu nombre, esos sueños son ahora para todos pues sin eso qué otra cosa nos
quedara a los hombres sino el llanto que produce nuestro olvido”…

Voz del Ateneo:
— “¡Somos fragmentos del amor!”

Voz del Ateneo:
— “¿Quién dices ser?, si toda cosa en ti comienza y termina”…

Voz del Ateneo:
— “Si cada guiño de tus ojos es un día”…

Voz del Ateneo:
— “Si la sombra de tus pasos es la vida”…

Voz del Ateneo:
— “Y nos has dado a todos un alma tan partida
que no pensamos sino en huir… ¿Quién dices ser?”

Voz del Ateneo:
— “Embriágame, mi diosa, quiero beber tu vino delicioso y si he de penar por este hecho pagaré el precio necesario pues quien no sufre por amor no ama”.

Voz del Ateneo:
— “La vida entera me entregó la transparente lucidez de tu presencia,
y comprendí la esencia de la diosa, tu ser, Ishtar, en mí”…

Voz del Ateneo:
— “¡Oh diosa!, Piensa más bien en quiénes somos tú y yo, yo y tú”.

Voz del Ateneo:
— “Oye, vine a decirte lo que todo el mundo sabe, tal vez…
Presta atención, no hay nada en esta tierra que no lleve el latir del corazón”…

Voz del Ateneo:
— “¿Contra qué debe uno rebelarse si el destino ya está escrito?”

Voz del Ateneo:
— “¡Somos fragmentos del amor!”

Voz del Ateneo:
— “Sólo es ahora y siempre ahora, más luego nunca”…

Voz del Ateneo:
— “Todo es eterno. No hay próxima vez para los dos”.

Voz del Ateneo:
— “A cada rato se renueva la promesa de ser y se reitera la palabra y la generación, ¡fecúndame, hazte cargo de este nacimiento que yo te produje a mi vez!”

Voz del Ateneo:
— “Quebraste mi paz a la inmensa distancia de este palmo
¿qué haría sin aquello que marcó mi futuro sin quererlo?”

Voz del Ateneo:
— “Explícame hoy como hago porque estoy seguro de que hoy es siempre
y no habrá ningún hoy ni ningún siempre sin este momento que ya fue”.

Voz del Ateneo:
— “Ya que el autor de la obra se oculta tras un velo he de cantar
sin pena y sin anhelo esta canción que revele el secreto
puesto que eres a la vez el sujeto y el objeto del amor”.

Voz del Ateneo:
— “Misteriosa realidad que no podemos ni queremos traspasar…
si es que hay algo que saber”.4


6 PALMA SOLA

Música: Manolo Sanlúcar. “Oración”.

Voz del Ateneo:
“La palma que está en el patio, nació sola;
creció sin que yo la viera, creció sola;
bajo la luna y el sol, vive sola.
Con su largo cuerpo fijo, palma sola,
sola en el patio sellado, siempre sola,
guardián del atardecer, sueña sola.
La palma sola soñando, palma sola,
que va libre por el viento, libre y sola,
suelta de raíz y tierra, suelta y sola,
cazadora de las nubes,
palma sola, palma sola, palma”.5


5 LOS ENTENADOS

Música: Heaven on their minds. “Jesus Christ Superstar”. Sólo instrumentos.

Voz del Ateneo:
“Varias veces los entenados fueron expulsados de la casa de su padre por deshonestos, mentirosos, o porque el dueño de casa se cansó de que vivieran a sus costas (costillas) o por holgazanes, o alguna otra justa razón.

Entonces los entenados negaron a su padre y se lanzaron contra él de modo violento, difamándolo, o diciendo que eran suyas las cosas que habían sacado de su mansión, incluso amenazándolo de muerte.

Esto sucedió dos o tres veces, después de lo cual se descubrió que eran parte de la ceremonia y repetían sin saberlo un mito arquetípico.

Judas no lo advirtió mientras contaba las treinta monedas de plata, y al contrario, se sintió rico y hasta posiblemente creyó haber cometido una acción heroica, porque ningún cagado se huele.

Sería arriesgado decir que una tradición esotérica se perpetúa también de este modo, como los que hoy defienden a Judas alegando que el héroe no es posible sin mediar la traición.

Son escogidos desde el principio, por sus propias características, para cumplir esa función. Los excrementos son considerados cargados de fuerza y poder biológico, aunque no logran superar su condición”.6


4 ORFEO ERRANTE

Música: Janet Baker. “Orpheus with his lute made trees”.

Voz del Ateneo:
“Bardo es aquel poeta que lucha por imponerse a sí mismo con la ayuda de sí mismo; por definición y vocación estará permanentemente solo y permanecerá incomprendido. En ese —y en todo— sentido el bardo no difiere del héroe y su comportamiento”.

Voz del Ateneo:
“El vate es un poeta y adivino, como el profeta, que actualiza siempre la perennidad del tiempo. La profecía es un don que se obtiene por inspiración y se refiere siempre al presente que es el único lugar en la geografía de lo Eterno”.7


3 CON 22 SIGNOS…

Música: Miles Davis. “It never entered my mind”.

Voz del Ateneo:
“Con veintidós signos o claves conocidas con el nombre de letras se completa un código que abarca la totalidad de las cosas que pueden ser nombradas, sin exclusiones ni omisiones posibles. Diez son los dígitos con los que se pueden obtener las indefinidas combinaciones de las posibilidades numéricas. Las letras son complementarias a los números como la geometría lo es a la aritmética. Conjuntamente definen a su manera las posibilidades de la forma en el espacio y el tiempo. Nada hay fuera del lenguaje salvo lo Innombrable. Un lenguaje es una estructura que revela la totalidad significativa y su significado significante. Es la expresión del Verbo hecho carne, encarnado. Todo lo manifestado configura un código o lenguaje, perfectamente legible y audible para quien quiera descifrarlo”.8


2 NOCHE DE BRUJAS. POEMA FINAL

Música: Tzuf Family Band. “Nachamu Ami Live”.

Voz del Ateneo:
“Somos viento”.

Voz del Ateneo:
“Y luz”.

Voz del Ateneo:
“Y la sustancia del pensamiento”.

Voz del Ateneo:
“Viento y luz y la sustancia del pensamiento”.

Voz del Ateneo:
“Somos número y armonía”.

Voz del Ateneo:
“Somos la idea”.

Voz del Ateneo:
“Y el símbolo que la refleja”.

Voz del Ateneo:
“Viento y luz. Viento, luz y la armonía de la idea”.

Voz del Ateneo:
“El número y el símbolo que lo expresa”.

Voz del Ateneo:
“Viento”.

Voz del Ateneo:
“Y luz”.

Voz del Ateneo:
“Y voz”.

Voz del Ateneo:
“Secreto”.

Voz del Ateneo:
“Libre, la idea. Y el símbolo que la expresa”.9


1 NOMBRANDO LO INNOMBRABLE

Voz de Federico:
“Hoy al despertarme en la mañana, durante el transcurso del día, al levantarme de la siesta, aparecen las manifestaciones de Dios que guardo siempre secretas”.

Música: Duke Ellington. “Solitude”.

Voz de Federico:
“Sus atributos, sus nombres, el de la Creación por la Palabra, la Luz, el Rayo, el Señor de ida y vuelta, el Siempre perenne, el que se autogenera, el Dios que se ignora. El que se recibe a Sí Mismo, el que no sabe quién es, el que no es sin mí. El que siempre te sume en la ignorancia. El escondido. El que No Es, el disfrazado de todas las cosas. El que se inventa a sí mismo.

¿Por qué esto es lo único que me interesa desde siempre?

El esquivo, el siempre presente, el principio y el fin y el Misterio, tú Mismo. Irremplazable, Arquitecto y Constructor del Cosmos, Sujeto y Objeto simultáneo, una Sombra, un vago Recuerdo, un gesto perenne y todo eso y mucho más en el vacío de tu mente que aparentemente no te conduce a nada porque no hay nada ni dónde, ni nunca, ni siempre, ni otra vez, ni lugar posible, aunque esta ignorancia es propia de tu Dios, la del precario Dios de González Frías, el que se acerca alejándose, al que recibes como huésped en tu casa, que no es sino un habitáculo de la suya, dicho todo esto sin demasiada pretensión, antes de que se produzca la distracción y el olvido.

El psicopompo Hermes Trismegisto, Quetzalcóatl, Gucumatz, Viracocha, el Padre Ñamandú, el Primero. El Señor de la quinta dimensión, del Silencio Absoluto. El Ser increado, el Dios es Amor nacido del Caos.

La perfección de las sefiroth de la Cábala hebrea, el de mi esposa la Shekhinah, los nombres divinos del Areopagita, el de la Moreneta, la Pilarica, la Sagrada Virgen de Guadalupe para los que somos guadalupanos, Nuestra Señora de Luján, el Santo Niño de Atocha, el Cristo Negro de Esquipulas, el cura de Ars, Teresita de Lisieux, la bendita ánima de los difuntos. ¿Quién será el Gauchito Gil?”10

*

Música: Offenbach. “Les contes d’Hoffmann”.

Voz del Ateneo:
— “Llevados por el símbolo, guiados por él, hemos llegado a una Utopía, tan real, como cualquier otro sueño, salvo que éste está signado por la certeza. Y guiados por todos los dioses, esos desconocidos, hemos llegado a las puertas del Misterio. Y entonces debemos callar, aunque tratando de hacer comprender a nuestros contemporáneos el valor del Silencio absoluto, de una magnitud que no puede medirse”.

Voz del Ateneo:
— “Vivificando la Tradición Hermética estamos cada uno en su casa, como si no pasara nada, aguardando el fin de un ciclo y rogando podamos transbordar a la majestuosa barca de Hermes y Anubis, para navegar perennemente por las aguas de lo no finito”.11


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Audiovisual
NOTAS
1 Federico González Frías. Ver online: Solsticio de invierno 1985
2 Federico González. Antología. Ed. Libros del Innombrable, Zaragoza, 2008. Ver online: Antología
3 Federico González Frías. Diccionario de Símbolos y Temas Misteriosos. Entrada: “Himnos”. Ed. Libros del Innombrable, Zaragoza, 2014. Integramente en versión online: Diccionario de Símbolos y Temas Misteriosos
4 Federico González Frías. Rapsodia. Obra en tres cuadros. Ed. SYMBOLOS, Barcelona, 2015.
5 Nicolás Guillén. Palma sola. Fragmento. Ver en Federico González Frías. Diccionario de Símbolos y Temas Misteriosos. Entrada: “Fenix”, op. cit.
6 Federico González Frías. Los entenados. Texto inédito.
7 Federico González Frías. Reseña al libro de Antonio Fernández Molina Orfeo Errante. Antología poética. Ed. Libros del Innombrable, Zaragoza 2008. Ver reseña en la web: Marginalia
8 Federico González. En el vientre de la ballena. Textos alquímicos. Ed. Libros del Innombrable, Zaragoza, 2024. Integramente en versión online: En el vientre de la ballena
9 Federico González. Noche de brujas. Auto sacramental en dos actos. Ed. SYMBOLOS, Barcelona, 2007.
10 Federico González. Antología, op. cit.
11 Documentos de la Iglesia Secreta I. “Proemio”. Ed. SYMBOLOS, Barcelona, 2014.
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